Entradas

• Entrada de materiales
  La mayoría de estos materiales entran en nuestras casas en forma de envases desechables de alimentos. Un hogar medio consume anualmente más de un millar de botellas, tarrinas, bolsas, latas y bricks, que suponen un flujo constante de acero (componente principal de las latas de hojalata), aluminio (en las latas de bebidas y algunas de conserva) y media docena de tipos de plásticos (en botellas de leche, bebidas carbónicas, zumos, refrescos, aceite, agua y en muchos tipos de tarrinas y bolsas para otros tipos de alimentos). Los bricks son un envase complejo compuesto por cartón y polietileno, por lo general con una capa añadida de aluminio.

Salidas

• Salida de residuos
  Al conjunto de estos materiales, una vez desechados, se le suele dar el nombre de “fracción de envases ligeros”. En el 2010 representaron aproximadamente un 15% de los residuos declarados por los municipios, pero una fracción mucho mayor en volumen. En 2016 se estimó entorno a los 33 kg el número de residuos de esta fracción por persona y año.